Algunos miembros de la comunidad del sur del Bronx y funcionarios electos piden que el control de la alcaldía acabe, otros argumentan que se extienda
Farah Despeignes, profesora de la secundaria Samuel Gompers en Melrose durante 14 años, no cree que las políticas educativas centralizadas en la ciudad de Nueva York estén haciendo una buena labor para responder a las necesidades únicas del sur del Bronx, y desea que la comunidad obtenga más información sobre lo que se enseña y sobre la política educativa en general.
“En el Bronx, la educación tiene que verse un poco diferente de lo que se ve en un lugar donde todo está bien”, testificó Despeignes en una audiencia legislativa del 4 de marzo. “No se puede tratar a un niño pobre que no tiene calefacción en su casa o que no come tres veces al día de la misma manera que se le enseña a alguien que va a Europa cada verano y tiene una casa en los Hamptons”.
En las próximas semanas, los legisladores del estado de Nueva York decidirán si les otorgarán mayor autoridad a los padres y maestros que comparten sus puntos de vista en la toma de decisiones sobre sus escuelas locales, o si todas las escuelas de la ciudad permanecerán bajo el control de la alcaldía.
Durante los últimos 20 años, el Departamento de Educación de la ciudad ha estado bajo el control de la alcaldía, lo que significa que el alcalde tiene el poder de nombrar y despedir al canciller de las escuelas, y también de nombrar a nueve de los 15 miembros del Panel de Política Educativa (PEP, por sus siglas en inglés) de la ciudad de Nueva York, quienes sirven al canciller como asesores.
Antes de 2002, las escuelas de la ciudad estaban gobernadas por una Junta de Educación que abarcaba toda la ciudad y 32 juntas comunitarias que enfrentaron recurrentes cargos de mala administración y corrupción. El exalcalde Michael Bloomberg buscó y se le fue concedido el control de la Legislatura, que supervisa la política educativa en todo el estado. Luego, Bloomberg cerró varias escuelas que estaban fracasando, abrió varias escuelas más pequeñas y alentó a las escuelas chárter, pero también hizo que los datos de las escuelas fueran más transparentes.
La mayoría de los sistemas educativos no son administrados por su alcalde. Y en Nueva York, el control de la alcaldía debe ser reautorizado cada cierta cantidad de años. Está previsto a expirar el 30 de junio.
La gobernadora Kathy Hochul incluyó una extensión de cuatro años en su propuesta de presupuesto estatal, que tiene al 1 de abril como fecha límite para su aprobación. Pero la Legislatura decidió eliminar la extensión del presupuesto para dar más tiempo para la deliberación. Los legisladores ahora tienen hasta el 30 de junio para actuar.
La audiencia del 4 de marzo duró siete horas, un indicio de los fuertes sentimientos acerca del control de la alcaldía. El alcalde Eric Adams habló durante los primeros cinco minutos y, luego, se fue sin responder preguntas ni escuchar otros testimonios. Otros que sí intervinieron fueron el canciller de escuelas, David Banks, miembros del Senado y la Asamblea, y más de 40 personas, en su mayoría defensores de los padres.
“Una extensión de cuatro años de esta política transformativa me permitirá cuatro años para hacer lo que sé que debe hacerse gracias a mi tiempo como senador, como oficial de la ley, como senador, como presidente del condado”, dijo Adams poco antes de salir de la reunión.
Si bien Adams y Banks presentaron su caso, apoyando extender el control de la alcaldía tal como está por cuatro años más, la mayoría de las partes interesadas dijeron que se oponían. Algunos argumentaron que no debería haber ninguna extensión en absoluto. Otros sugirieron una extensión más corta, para dar tiempo a la Legislatura para crear un sistema alternativo y para garantizar que el alcalde pueda rendir cuentas antes del final de su mandato de cuatro años, que comenzó en enero.
La asambleísta Amanda Septimo, cuyo distrito incluye una gran parte del sur del Bronx, dijo que el sistema de control actual de la alcaldía “no está funcionando” y que está dispuesta a abogar por un nuevo sistema que les dé a los padres más poder.
“Constantemente escucho que los padres no se sienten lo suficientemente involucrados. Se toman decisiones sobre las escuelas sin ellos”, dijo Septimo. “Muchas veces parece que los padres son tratados como reflexivos dadores de opinión, pero no necesariamente vistos como socios iguales en la toma de decisiones. Creo que eso lleva a políticas que ignoran el rol que se debería permitir que los padres desempeñen”.
Despeignes, quien ahora es presidenta del Consejo de Educación Comunitaria 8 de Soundview y fundador de la NYC Coalition for Educating Families Together, dijo que bajo el control de la alcaldía, las decisiones se toman sin el aporte de educadores, padres o estudiantes en el terreno. Dado que la brecha de desigualdad en Nueva York es tan amplia, y las comunidades tienen necesidades tan diferentes, políticas escolares amplias hechas por el alcalde y destinadas a cubrir toda la ciudad suelen descuidar las necesidades de las comunidades marginadas, dijo.
Por ejemplo, señaló, el “trabajo pesado” para preparar a los niños para el aprendizaje es mucho mayor en las comunidades de bajos ingresos: “Si no estás en el terreno y no estás en los hogares de las personas y no estás compartiendo sus experiencias, ¿cómo sabes [lo que necesitan]?”
El senador estatal Luis Sepúlveda, quien representa partes del sur del Bronx, incluyendo Longwood y Hunts Point, dijo en la audiencia que confía en que Adams satisfará las necesidades de su distrito. Sepúlveda dijo que está preocupado por las tasas de graduación de su distrito y cree que el control de la alcaldía de Adams ayudará.
“[Una extensión de dos años del control de la alcaldía] es insuficiente para obtener resultados en los cambios que tú [Banks] estás tratando de implementar”, dijo Sepúlveda. “Estoy a favor de una extensión de cuatro años y continuaré abogando por cuatro años para que usted y el alcalde tengan el tiempo de establecer lo que quieren establecer con nuestros hijos”.
Los senadores estatales Alessandra Biaggi y José M. Serrano, cuyos distritos incluyen Hunts Point y Mott Haven respectivamente, no respondieron a las preguntas sobre su opinión acerca del control de la alcaldía, a pesar de que eventualmente votarán sobre ello.
El canciller Banks dijo que reconoce que hay fallas en el sistema actual y que los padres no son escuchados lo suficiente. Pero Banks le recordó repetidas veces a los legisladores que tanto él como Adams crecieron en la ciudad de Nueva York y asistieron a escuelas públicas. Dijo que está comprometido a acercarse a los padres en todo momento durante la creación e implementación de políticas.
“No quiero crear una política pública en la que las familias sientan que no han sido parte del proceso”, dijo Banks. “Eso no va a pasar conmigo como canciller. Acabo de llegar aquí, pero estoy totalmente comprometido con esto”.
Traducido por Natalia Sánchez Loayza.